Capítulo 14

Que sorpresa-Dije sonriendo.
-Pues...casi prefiero decírtelo en persona, mañana llegamos a Londres, hemos reservado en un Hotel allí te lo contaré-Dijo, se la notaba feliz.
-No, cuantamelo ahora-Dije, odiaba las sorpresas.
-Solo te doy una pista-Dijo, como le gustaba dejarme con intriga.
-Jo...-Dije quejandome.
-¿Quieres saberla o no?-Dijo.
-Si, si claro-Dije entusiasmada.
-Lleva un tiempo creciendo-Dijo, seguramente soltó-Adiós, tengo prisa-Colgó sin dejarme decir nada.
Si, claro, como que con eso pudo sacar mucho pensé en mi cabeza.
-Quien era- Pregunto Samantha con su habitual sonrisa.
-Era mi madre, mañana llega en el vuelo que viene de España-Dije feliz.
-Ah, que bien-Dije extendiendo más su sonrisa.
-Si, dice que tiene algo que decirme, no sé que sera-Dije pensativa.
-Bueno que comemos, o esperamos a que venga la madre de Mel-Dijo Louis soltando una carcajada.
Nos sentamos en la mesa y comimos, luego nos fuimos todos a dar un paseo por el centro y nos compramos unos helados. Harry y yo íbamos de la mano, ignorando lo que pasaba al rededor, entre besos y sonrisas.
-Al final os vais a chocar con una farola-Dijo Niall dirigiéndose a nosotros. Todos se rieron, nosotros nos sonrojamos.
-Que gracioso-Dijo Harry
-Ya, lo sé-Dijo muy orgulloso.
Ya era tarde así que volvimos, me fui a casa y me metí pronto en la cama. Él vuelo de mama llegaría muy pronto, casi de madrugada y no me daría mucho tiempo a dormir.
A la mañana siguiente me desperté, mire la hora, llegaba tarde, me metí en el vestidor corriendo y me vestí con lo primero que pille, me peine y me maquille un poco:http://www.polyvore.com/rojoo/set?id=43965760. Me asome a la ventana, todavía era de noche. Baje corriendo, y cogí mi bolso. Salí por la puerta y corrí hasta la parada del bus, casi lo pierdo y no salía otro hasta dentro de 45 minutos. 
Llegue al aeropuerto, el viaje fue largo ya que vivía bastante lejos del aeropuerto.
A lo lejos vi a mi madre, estaba mucho más gorda, y al lado iba su novio con todas las maletas.
Me acerque a ella corriendo y la abrace, su tripa estaba dura, y otro corazón se oía latir dentro. No me lo podía creer estaba embarazada.
-Estas embarazada, dios que gorda, voy a tener un hermanito o una hermantita, no lo sé, ¿Tú lo sabes?-Dije sin dejar hablar a mi madre.
-Cariño, tranquilizate, espero que lo de gorda lo digas en el buen sentido, y no sé si es niño o niña pero le querremos igual-Dijo intentando tranquilizarme.
-Si, claro en el buen sentido, y claro que le querremos. Por cierto, el autobús no creo que se quede mucho rato a esperarnos así que vamos-Dije saludando a su novio Carl.
Nos fuimos hacía la parada del bus, de camino la iba preguntando nombres que pensaba ponerle decía que si era niño Mario y si era niña Annie. Me gustaba la idea de hacerme hermana mayor, no paraba de pensar en como serian, en el tiempo que pasaría jugando con el o ella, hasta que pensé en que mi madre algún día volvería a España.
El autobús llego y nos montamos en el, cuando nos sentamos pregunte.
-¿Y cuando volvéis a España?-
-Ya nos quieres echar-Dijo bromeando.
-¿Que? No, nada de eso, era solo para saberlo-Dije con cara de inocente.
-Pues, de momento, tenemos pensado... Quedarnos a vivir aquí-Dijo en modo sorpresa.
-Que bien-Dije subiendo el tono de voz, la gente me miraba sonriendo, parecía que todo el mundo se estaba enterando de lo que pasaba.
Llego nuestra parada, así que bajamos, les acompañe al hotel y me volví a casa.
Cuando estaba a diez metros de casa vi que alguien estaba sentada en la puerta. Otra vez él, no se cansaría de molestar.
-¿Que quieres ahora?-Dije bordemente.
-Así que vives aquí-Dijo señalando mi casa.
-¿Quieres algo Alvaro, o solo es por molestar?-Dije con mala cara